Ilusión

Una cosa que me molesta mucho de Salva es que es muy humilde. Sino es por él la revista Ohjas Sueltass jamás habría nacido. Bien es cierto que la gente de la que se ha rodeado le ha ayudado en algunos aspectos, sobre todo en el segundo número cuando él ha tenido menos tiempo pero la idea primigenia suele ser de él. La mayoría de las cosas que salen, o que no, suele ser por él. Que sí, que hacemos consenso, que se vota, que nos reunimos, que hacemos lluvia de ideas... Pero nada sería igual sin Salva y esto lo digo como lo siento.
Es un problema estar con él demasiado, lo llevo viendo dos días seguidos y me está volviendo un poco loco porque no paramos de hablar y surgen mil cosas. A mí también me entran muchas ganas de hacer mil cosas pero creo que tengo la cabeza en más lados y me planteo las cosas de otra manera, sin embargo, todo lo que es factible lo solemos hacer o lo planteamos para que se haga. Hay una serie de proyectos muy interesantes y que pueden dar un soplo renovador a la anquilosada y aburrida vida cultural de la Universidad de Córdoba porque son cosas nuevas que vamos a hacer un grupo de gente a la que nos gustan estas cosas, de verdad que las disfrutamos y nos comemos el coco para que nada sea igual a lo que ya se ha hecho. Tenemos mil proyectos y algunos se podrán hacer y otros no pero creo que vamos bien encaminados.
Ohjas Sueltass no se va a quedar solo en una revista, eso está claro. Va a ser algo más porque nos estamos moviendo para que sea algo más. No te digo una generación literaria, ni mucho menos, pero sí le estamos dando una publicación a futuros escritores que, seguro, serán importantes y ya se acordarán de nosotros -¡ESPEREMOS!- cuando sean alguien y nosotros vivamos una vida plácida y tranquila, lejos de follones y charlando de literatura por el Messenger.
Y podría seguir hablando del resto de mis compañeros pero la cosa quedaría super larga y no la leería nadie así que aquí me corto pero no se crean que será el único post dedicado a esto. No, no...