viernes, marzo 07, 2008

Indignación

Matar a un hombre es siempre un acto deleznable. Matar a sangre fría por una utopía, por un pensamiento político, por no ser españoles, porque se les llame vascos, por ser una nación... me parece aún más deleznable. Hay veces en las que creo que deberíamos rebajarnos a su altura y pido a gritos la pena de muerte, la más brutal, y recuerdo el caso GAL, vuelvo a leer todos los artículos y noticias escrito sobre él y me río, hay veces en los que incluso me alegro. Pero después recapacito, y pienso que nadie tiene que robarle a alguien algo tan preciado como la vida. Ya sé que es el mismo discurso de siempre, pero, ante todo, la vida.
Cuando lees en Internet que ha sido asesinado un ex concejal socialista en Mondragón y que todo apunta a ETA... piensas que son una pandilla de hijos de puta y que con esto quieren demostrar que siguen vivos, que por más detenciones, por más que el gobierno francés y español colaboren para derrotarlos, siguen con la fuerza suficiente como para hacer atrocidades como esta.

Desde aquí mi más sentido pésame a la familia y mi más profundo asco a esta gente de ETA.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Tristemente cierto.
Pero lo peor es que por mucho que los gobiernos combatan a ETA, coger una pistola y pegarle unos cuantos tiros a alguien es de lo mas facil y no solo ETA.
Estoy de acuerdo contigo, a veces dan ganas de que vuelvan los GAL. En fin, los dorados años del socialismo felipista......... ahihsssss¡¡

Joaquín.

Picalcan dijo...

No. El terrorismo se combate con democracia, con libertar, con votos, con justicia. Nunca matar a quien mató, porque conseguiremos hacerlos mártires. Hace años, cuando la época dura de ETA, y cuando mi juventud me hacía ser incluso más impulsivo que ahora, en una reunión con personas mayores dije que por cada uno que cayera de los nuestros, aparecieran 4 muestros de ellos. Un anciano me dijo que los romanos quisieron acabar con los cristianos de la misma manera, los hicieron mártires y mira los que son ahora. Era cierto.
También recuerdo una viñeta que decía que en Francia "El GAL" sería "LE GAL".
No quiero que los democratas nos convirtamos también en asesinos, con ello conseguirían lo que quieren, que fueran las armas la que toman la palabra. Y eso no lo podemos consentir la gente de bien.
JUNTOS PODEMOS CON ELLOS. SON POCOS Y COBARDES.

Anónimo dijo...

La cuestión no es si acabamos o no con ellos, sino el modo. ¿Negociando y poniéndolos en nuestra misma mesa a nuestra altura, como ha hecho ZP?