Podemos feriear

El verbo feriear no existe, pero uno que está estudiando Hispánica ha decido crearlo con motivo de este post que da el pistoletazo de salida (que ganas tenía de usar esta expresión) a la Feria de Nuestra Señora de la Salud que antes era de animales y aunque ahora los animales tienen peinados con tintes y pelo de pincho, algún que otro pendiente que no sé si es marca de ganadería y muchas ganas de entrar en disco-casetas, la feria sigue siendo casi lo mismo.
Es bonito ver a tanto cordobés junto, todos concentrados, rozándose, bebiendo, bailando... Y es que a mí, aunque la feria no me gusta demasiado, siempre me enganchan para ir, al menos, seis días. Esto a mi bolsillo no le hace demasiada gracia pero al dueño del dinero sí, porque, no sé como lo hago, siempre acabo dándole al fino montillano que es lo típico por más que a algunos les dé por beber ron con cola. Pero bueno, no a todo el mundo le gusta eso de ir con la botellita de vino y los vasitos de plástico en la mano y prefieren un cubalitro para que se le hielen bien las manos. No pasa nada, si ellos son felices así...
A mí me gusta la feria por el ambiente y por lo que me río en las atracciones que me monto. Las mayoría intenta dar miedo pero siempre suelen llevarse algún bailoteo que otro porque nos montamos (y hablo también por mis amigos) cuando ya vamos un pelín pasadetes. Y es que la juventud... La juventud se reúne en las disco-casetas. A la gente como a mí, juventud con mentalidad puretona, prefiere las casetitas de sevillanas y flamenco de ese guarro que se hace ahora que ni es flamenco ni ná.
También en la feria hay toros y corridas en el Coso de los Infantes:

Pero también me gusta la feria porque coincide con la final de Eurovisión y yo soy fan de Rodolfo Chiquilicuatre y de su Chiki- Chiki. MAÑANA TODOS PODEMOS PERREAR.